DE NUESTRO PÁRROCO ASOCIADO
En el Evangelio de este Domingo, 24 de Enero 2021, el Evangelista San Marcos nos presenta el inicio de la vida pública de Jesús; es decir su ministerio público. Jesús inicia su vocación y ministerio con dos exhortaciones: conversión, creer en su Evangelio y seguirlo a Él.
Después de que arrestaron a Juan, el Bautista, Jesús se fue a Galilea para predicar el Evangelio de Dios y decía: “Se ha cumplido el tiempo y el Reino de Dios ya está cerca. Conviértanse y crean en el Evangelio” (Marcos 1, 14-15). ¿Qué significa convertirse? Significa cambiar de mentalidad, vocabulario, comportamiento, ideologías, filosofías y psicologías para creer y aceptar el Evangelio que Jesús nos predica este Domingo.
Obviamente es un Evangelio completamente diferente a lo que el mundo de hoy nos ofrece. Jesús nos exhorta a un Reino de paz y de justicia; a un Reino de amor y comprensión; a un Reino de solidaridad y comunión con los más desprotegidos y desamparados. ¡El Reino de Dios también nos exhorta a practicar lo que enseñamos y predicamos! Jesús nos invita a ser diferentes y auténticos seguidores en Su seguimiento. El seguirlo no solamente en los momentos bonitos y maravillosos, sino también en los momentos obscuros, confusos e inseguros porque con El todo es posible. “Todo lo puedo en aquél que me fortalece” (Filipenses 4,13).
Jesús no solamente nos exhorta a convertirnos y creer en el Evangelio, sino también en seguirlo. Cuando Jesús comienza su ministerio público, se da cuenta que la cosecha es abundante y los trabajadores pocos; es por eso que llama a sus primeros cuatro discípulos. Caminaba Jesús por la orilla del lago de Galilea, cuando vio a Simón y a su hermano, Andrés, echando las redes en el lago, pues eran pescadores. Jesús les dijo: “Síganme y haré de ustedes pescadores de hombres”. Inmediatamente dejaron sus redes al igual que Santiago y Juan, hijos de Zebedeo, y lo siguieron (Marcos 1, 16-20).
¿Cuántos de nosotros estamos dispuestos a dejarlo todo y seguir a Jesús? ¿Cuántos de nosotros ponemos toda nuestra fe y confianza en Jesús en medio de tanta confusión e incertidumbre con lo de la pandemia? ¿Cuántos de nosotros estamos dispuestos a hacer un cambio en nuestras vidas y creer en el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo?
Con cariño su servidor, Padre Alberto Villafán, ofm.