Reflexión Pastoral 7-14-2024
Jesús, nuestro Salvador y Redentor no solamente envía a sus discípulos a proclamar la Buena Nueva, sino que también nos envía a cada uno de nosotros a hacer lo mismo. El envío es una obligación no solamente para los sacerdotes y consagrados, sino para todo aquel hombre y mujer que ha sido bautizado(a). ¿Cómo podemos ver, experimentar y escuchar por parte de nuestro Salvador si “la cosecha es mucha y los trabajadores son muy pocos”?